Por: Eddy Rodríguez

Comunicaciones ganó el clásico 312 contundentemente. Tres a cero, con doblete de Jorge Aparicio, y uno más de Lezcano. Aunque Municpal tuvo más el balón, el equipo blanco fue más certero, y con esta victoria pone más tierra de por medio en su afán por mantenerse líderes del campeonato.  

Eso sí, el partidó empezó muy titubeante, con lapsos alternos de dominio de cada equipo, sin generar jugadas de peligro, sin disparos a ninguno de los dos arcos, con ambas escuadras más preocupadas en estudiarse que en arriesgar el primer ataque. Quizá la única jugada que pudo haber insinuado peligro, había ocurrido al minuto siete, cuando Umaña derribó a Ramiro Rocca en el filo del área. Una falta que desencadenó en un tiro libre frontal para el equipo rojo. El propio Ramiro hizo el cobro con potencia, a ras de hierba, pero muy desviado.

Hasta el minuto 21 apareció el primer disparo con dirección auténtica de arco. Alejandro Galindo, a base de tripas corazón, metiendo el cuerpo, muy a su estilo, haciéndose del espacio, sacó un disparo fuerte, lejano, que tomó buena altura pero cuya parábola jamás llegó a completarse.

Para entonces, Comunicaciones jugaba mejor y empezaba a inclinar el campo con llegadas cada vez más frecuentes. Esas primeras acometidas, especialmente por las bandas, derivaron en dos tiros de esquina consecutivos. En el segundo, ocurrido al minuto 25, el 25 blanco nos regaló un gol antológico, extraordinario. Lezcano había cobrado el tiro de esquina desde la izquierda, colgando el balón justo al corazón del área y luego de varios rebotes, apareció Jorge Aparicio, durmió el balón de pecho con el arco a las espaldas, acomodó el cuerpo y de chilena la mandó a guardar, ante un Nicolás Hagen impotente.

En seguida Municipal se lanzó en busca del empate. Lo más cerca que estuvo de lograrlo fue en un disparo lejano del Gambeta Díaz, un tiro sin peligro que, sin embargo, el Chepo Calderón no supo contener y dejó rebotado frente a su portería. Ramiro Rocca se apresuró a empujarlo a las redes, pero el delantero rojo estaba en fuera de lugar.

En los minutos finales del primer tiempo, Lezcano tuvo en sus botines el segundo para los locales, gracias a que Alejandro Galindo le asistió dentro del área. Lezcano solo debía empujarla ante un Nicolás Hagen que llegaba jugado, pero el delantero tico prefirió acomodar primero el balón y en ese titubeo, la defensa roja llegó a cerrarlo.

En los primeros instantes del segundo tiempo Municipal estuvo a nada del empate, cuando Ramiro Rocca cabeceó a placer frente al arco de Calderón; la pelota se estrelló en la parte interna del larguero, picó justo sobre la línea y luego se marchó fuera. Esos quince minutos iniciales, fueron sin duda los mejores de Municipal; dominio absoluto de los escarlatas, insistiendo con centros al área, la mayoría provenientes de la banda de Jaime Alas.

Pero Comunicaciones terminó sacándose la opresión con el segundo gol al 58. Un error en salida de la saga roja, concluyó con un pase filtrado del Tin Herrera para Lezcano, quien, ahora sí, sin pensarlo demasiado, le perforó el arco a Nicolás Hagen con un disparo cruzado.

Y unos minutos después, Jorge Aparicio le pondría los últimos clavos al ataúd rojo. La jugada empezó con Jostin Daly arrastrando el balón en soledad ante la salida de Nicolás Hagen; el delantero blanco definió cruzado y el guardameta rojo rebotó el balón justo donde llegó Jorge Aparicio, quien solo debió empujarla al fondo para poner el tres a cero.

Municipal, por tercera vez, se lanzó en busca del gol, aunque entonces ya estaba herido de muerte. Los últimos veinte minutos tuvo el balón y buscó el arco blanco, sobre todo, por medio de disparos de media distancia, pero no logró hacer mayor daño. De modo que el partido terminó con el arco de Calderón en cero, y con una victoria que demuestra que el equipo blanco ha sido y sigue siendo el mejor del certamen, el favorito para ganarlo. Simplemente imparables.