Por: Eddy Rodríguez

Comunicaciones hoy lo tuvo todo a favor para perder: un gol de camerino encajado en cada tiempo, la lesión desafortunada de Stheven Robles y una anotación anulada de forma injusta.

Cuando apenas corría el minuto tres, Antigua tomó la ventaja gracias a una escapada por el costado derecho. Josué Martínez lanzó un centro al corazón del área y el otro Martínez, Nicolás, apareció para cabecear a placer ante un José Calderón desamparado. Otro partido más en que Comunicaciones tendría que remar contra la corriente.

Antigua, con el marcador a su favor y el balón en su dominio, buscó hacer más daño. Casi lo consigue, encimándose siempre por la misma banda. Sin embargo, paulatinamente el equipo blanco logró salir de la opresión colonial. Y al minuto 24 Jorge Aparicio, sin duda, el más luchador de los blancos, empató el partido. Un mal despeje de Pinto había dejado el balón servido para que el mediocampista albo lo incrustara en el ángulo, gracias a un derechazo violento, formidable.

Comunicaciones terminaría mucho mejor la primera mitad, y se habría ido al descanso con la ventaja, de no haber sido por el terrible error del línea que levantó la bandera sin razón entendible, luego de que Jostin Daly definiera de primera una asistencia del dinámico Aparicio.

Apenas inició el segundo tiempo (y como si tratase de un déjà vu del primero), los panzaverdes se pusieron arriba. Esta vez fue Jairo Arreola quien hizo notar las graves deficiencias que existen en la defensiva crema. Condujo el balón como en sus mejores tiempos, dejó sembrado a Umaña y luego definió al costado izquierdo del Chepo Calderón.

Comunicaciones buscó hasta final el empate y quizá llegó a merecerlo. Pero Antigua se cerró por completo. El partido terminó con Aparicio expulsado de manera cuestionable. Un partido que se pierde uno a dos, al igual que se pierde el invicto y de paso, la exclusividad del liderato.